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Ayer te conté de dos de los grandes miedos de los emprendedores: crear empresa y tener socios. Hoy voy a hablar de otro miedo que suelen tener los emprendedores, y es el crear empresas grandes.
Aunque cada vez vemos más emprendedores que sueñan con tener empresas gigantes, y seguir los pasos de los grandes empresarios sobre los que leemos en las noticias, la mayoría piensan con tener empresas pequeñas. Incluso estos soñadores, pocos diseñan sus empresas para corresponder con sus sueños. Si quieres tener una empresa grande, debes diseñarla para que algún día sea así, incluso si debes empezar con algo pequeño.
Mi filosofía es que si tú tienes algo bueno para ofrecerle al planeta y mejorar la vida de las personas, tu obligación moral y espiritual, es llegar e impactar al mayor número de personas. Esta afirmación puede ser atrevida para ti, y respeto si piensas así, pues esta filosofía lo entendí hace pocos años.
Video ¿Qué Tan Grande Quieres que sea Tu Negocio?
La mayoría de las personas hemos crecido en sociedades donde de forma irónica, abundan los pensamientos de carencia. Se nos enseña, desde muy pequeños, que el dinero es difícil de conseguir y que toca trabajar mucho para conseguirlo. Además, tenemos muchos conceptos erróneos sobre el dinero, entre otros, que trae maldad. Más adelante te contaré más sobre este tema, pero por ahora solo te digo lo siguiente: el dinero es solo dinero, y el ponerle un calificativo como bueno o malo, es un tema humano, relativo y que no es ni cierto, ni falso. De esta forma solemos crecer, la mayoría de las personas, con mentalidades que pocas veces atraen la abundancia a nuestras vidas.
Con este cambio de mentalidad, entendí que no tiene nada de malo crear empresas grandes, que ayuden a la sociedad en muchos aspectos. Y es crear empresas grandes no por hacer dinero, pues hoy pienso que este no debe ser un objetivo, sino por el contrario, es una gran adición con la que se te recompensará por un trabajo bien realizado.
Este tema es muy largo y complejo. Por el momento te comparto estas ideas iniciales, y que recuerdes que no hay nada ni nadie (bueno, ¡solo tú!) que diga que tú no puedes crear un negocio realmente gigante.